EL K2 EN EL TRAIL VALLE DE TENA
Pasados unos días de la carrera doy marcha atrás para recordar un poco lo vivido. Llegó a Panticosa el viernes con un nudo en el estómago tremendo pensando en la que se avecinaba. Todavía no se me había pasado el mal trago de travesera y solo pensar en el sufrimiento que iba a pasar me ponía malo.
Pero aquí había una gran diferencia de copiloto llevaba al gran David Rioja que iba a hacerme los avituallamientos y me acompañaría un buen tramo de la carrera en el tramo de casa de piedra pasando por el Garmo hasta Tebarrai. A demás de ser amigo es un tío positivo y que lo vive al 100% y es un gran atleta con el que entreno a veces y me saca los ojos.
Allí habíamos quedado con Raúl López amigo mío y pareja de entrenos y carreras desde el primer año que empecé a correr y nos conocimos en la carrera de Brieba y desde ese día nos hicimos muy amigos. Raúl el el segundo ganador de el campeonato de la Rioja de carreras de montaña después de mi y nos sincronizamos muy bien corriendo. El iba con Vanesa quien sería su avitualladora.
Al llegar me llamó Pabli y Sara que estaban por allí y nos motivaron un poco y nos dijeron donde estarían más o menos y de allí a por el dorsal después preparar mochila, cenar, y al sobre.
A las 4:20 nos encontramos al lado de la salida y allí empezaron los nervios, pasamos el control de material y de ahí al burladero. Atracados de los nervios y sin darnos cuenta fueron la salida y allí salimos hacia delante como rayos hacia la primera subida.
Al ser de noche no teníamos claro nuestra posición pero sabíamos que era entre los 30 primeros y fuimos avanzando a un buen paso. Raúl tuvo su primer ostión bien pronto por un despiste y por suerte no se hizo nada mientras pasábamos por piedras y piedras y más piedras y ya después de 2400 positivos nos pusimos a bajar por fin hacia el balneario y llegamos como toros.
Allí ya estaban nuestros ayudantes que nos ayudaron y vivimos a la carrera pero allí éramos ya tres con el gran David que se dedico a llenarnos botellas de agua en los arroyos y a mojarnos las gorras ya que hacia un sol de justicia.
Después de un largo rato subiendo más piedras llegamos al Garmo Negro un espectáculo por lo duro por las vistas y por todo y allí ya se sumaban ya 3800 positivos.
Nos pusimos a bajar dirección Bachimaña y bajábamos como jabalís a un ritmo fuerte para el terreno peligroso que era y allí fue mi momento que por otro despiste ostión al canto que me dejó la pierna dormida un minuto pero solo eso para la caída tan espectacular que fue. Llegamos a el refugio y otro avituallamiento bien echo modo profesional sentados y nuestro equipo preparando la bebida la comida y motivando.
Salimos dirección Tebarrai y allí yo sabía que iba tocado, la subida al Garmo iba un punto por encima y me estaba pasando factura y no llevaba ni 30 kms así que decidí bajar el ritmo un poco y dejar marchar un poco a Raúl y a David. Eso sí sin perderlos de vista. Mi cabeza me decía de todo pero sobre todo me pedía la retirada todo el rato y estuve super jodido mentalmente pero al llegar a Tebarrai vi una tía fina fina y un tío sin pelo con pinta de macarra que según me vieron empezaron a motivarme y ahí fue el punto y a parte empecé a bajar dirección Respomuso como un avión paso firme y bien ritmo adelantando a un montón de corredores de la carrera mía y de la de 40 y empecé a crecerme llegue al refugio y ya había cogido a Raúl y David dio la vuelta para ir en busca de Vanesa para ir al siguiente avituallamiento.
A partir de ahí hicimos la última subida y nos pusimos a bajar hacia la rasa una bajada de 1100 metros negativos que se hizo más larga que el el copón y llegamos al avituallamiento sin piernas más jodidos que en vendimias y allí estaban los héroes invisibles avituallando.
Nos sentamos comimos bebimos y nos levantamos hechos polvo física y psicológicamente sabiendo que era el km 56 y que quedaban 22 con 1400 divididos en dos bloques de 700 para arriba para abajo otra vez para arriba y ya todo tieso para abajo.
Empezamos a subir sin fuerza a Pago Caracol pero sin parar y sin hablar, parecíamos zombis y después de un largo rato llegamos a la cumbre.
De allí una bajada muy sencilla por senda limpia hasta Formigal y de allí a Sallent pero en un cruce un despiste nos perdimos unos 10 minutos eternos ya que íbamos ciegos.
Llevamos a Sallent y el último avituallamiento. Muy candados salimos hacia arriba, Raúl se puso a devolver por culpa de tanto gel comida coca cola y de todo y al echarlo allí salió más fuerte ya que llevaba tiempo mal de las tripas. Subimos un rato y la primera chica bajaba muy nerviosa diciendo que íbamos al revés y que se lo Javi dicho un señor así que la seguimos pero nos encontramos con otros que nos dicen que íbamos bien así que otra vez para arriba. Momento de tensión superado pero tiempo perdido y fuerza. Al llegar arriba último control y para abajo sin prisa pero sin pausa y poco a poco llegamos a la meta c con un subordinados increíble y superando todas las adversidades que tuvimos. La carrera un diez y la organización un cien por no decir el paisaje un mil.
GRAN CARRERA.
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